A pesar que la Madre Teresa de Calcuta es un personaje contemporáneo, muy cercano a las generaciones actuales y como tal se le puede ver como alguien próximo a nosotros, lo que muchas veces trae consigo descalificaciones infundadas, es una religiosa que en vida gozó de gran popularidad por su entrega y dedicación a los más necesitados y carentes de riquezas materiales y espirituales.
En vida ya era considerada como una persona santificada por Dios y después de su fallecimiento, con el reconocimiento como intercesora para obtener logros inexplicables desde el punto de vista humano, se le reconoció por parte del Vaticano sus dotes de santidad y se hizo meritoria de ser declarada Beata por la Iglesia Católica.
¿Quién fue Teresa de Calcuta?
Fue una religiosa católica nacida en Albania, que desarrolló la mayor parte de su vida como misionera en la India, donde se naturalizó. Allí, en 1950 viviendo en Calcuta, fundo una orden religiosa que denominó Misioneras de la Caridad.
AgnesGonxha, que significa “Inés, pequeña flor”, nació el 26 de agosto de 1910, en un poblado de la actual Macedonia, antigua Albania. Recibió en su hogar una sólida formación religiosa. Pertenecía a una familia económicamente bien establecida que se distinguía por siempre ayudar a los pobres.
Sin embargo, teniendo Agnes entre 8 y 9 años de edad falleció su padre, entrando su familia en grandes dificultades económicas. A los 18 años se fue a Irlanda para ingresar al Convento de las hermanas de Loreto, adoptando el nombre de Teresa, en reconocimiento a Santa Teresa considerada Patrona de las Misiones. Al poco tiempo fue enviada a Calcuta para ejercer la función de maestra y enfermera, permaneciendo allí durante varios años.
Su misión en la vida
Desde antes, siendo seglar, ya manifestaba su deseo y dedicación a ayudar a los más necesitados y después de formar la congregación religiosa, se dedicó completamente a atender a los más humildes, prestando la mayor atención a niños huérfanos y a los moribundos, comportándose como una verdadera madre para quienes ayudaba. Está labor la cumplió durante ininterrumpidos 45 años.
Logró multiplicar su misión de vida, a través del crecimiento de su congregación, la cual expandió inicialmente por diversas regiones de la India y después a nivel mundial, trasmitiendo siempre a sus seguidoras que debían prestar su ayuda sin egoísmo y con el amor propio de una madre.
Acercamiento a Dios
La Hermana Teresa en el año 1946 al asistir a un acostumbrado retiro espiritual y según ella manifestaba, durante el mismo recibió señales de Dios, haciéndole un llamado a que dedicara con amor y desprendimiento a los más necesitados espiritual y materialmente. Esto hizo que interiormente sintiera la necesidad de cambiar la forma de vida que hasta ese momento llevaba.
Según refería ella misma, a partir de allí, frecuentemente tenía visiones divinas, por medio de las cuales Jesús la conminaba a cumplir la nueva misión a la que estaba destinada, revelándole a través de esas visiones que Él sentía demasiado dolor por el desconocimiento que muchos tenían de Dios, por la indiferencia que existía hacia los pobres y por la necesidad de ser amado por la humanidad, especialmente por los más desposeídos. Constantemente percibía una voz que le imploraba: ven y sé mi luz.
Fundación de una orden religiosa
La Hermana Teresa después de tantas revelaciones tomó la decisión de separarse de la Congregación de Loreto y se fue a sitios donde podía convivir con personas muy necesitadas, preparándose para prestarles ayuda material haciendo un curso de asistencia médica elemental con las Hermanas Médicas Misioneras, porque para ofrecer ayuda espiritual ya ella estaba preparada. Durante un tiempo convivió con las conocidas Hermanas de los Pobres.
Posteriormente, en el año 1950, el 7 de octubre, día de Nuestra Señora del Rosario, fundó la Congregación de las Misioneras de la Caridad, con un grupo de jóvenes que escuchado sus prédicas y compartido sus quehaceres en beneficio de las personas necesitadas, decidieron dedicar su vida a esa noble causa, pasando la Hermana Teresa a ser la Madre Superiora de la nueva agrupación religiosa.
Propagación mundial de su labor misionera
Diez años después, la Madre Teresa tomó la iniciativa de propagar su ayuda en otras latitudes, enviando religiosas de su Congregación a establecerse en otras regiones, siendo Venezuela escogida como el primer país extranjero donde se llegaron, expandiéndose después a diferentes países, inclusive a algunos con regímenes comunistas. Cuando la Madre Teresa falleció, los integrantes de la Congregación estaban activas en 123 países.
Dada la receptividad que siempre tuvo su misión de ayuda humanitaria, que llegó a ser reconocida aun por los gobernantes, la Madre Teresa diversificó las labores de la Congregación, organizando y creando agrupaciones con objetivos más específicos, como son las Hermanas Contemplativas dedicadas más que todo a la Oración y ayuda espiritual, los Sacerdotes Misioneros de la Caridad con funciones semejantes a las de agrupación original de las Hermanas Misioneras de la Caridad; además de agrupaciones laicas denominadas Colaboradores que prestaban ayuda directa a enfermos y personas económicamente necesitadas.
Fundamentos para su trabajo
La Madre Teresa prodigaba la idea que la pobreza moral y la espiritual es más importante y que amerita mayor atención que la pobreza material; el primer tipo de pobreza puede estar presente independientemente del estatus económico y necesitan más ayuda, por lo tanto rezaba continuamente por ellos.
En su actividad misionera transmitía la palabra de Dios y sus enseñanzas utilizando el más sencillo lenguaje pata que fuera entendido y aceptado; pero además, en sus constantes visitas a las familias desempeñaba cualquier acción que fuese necesario, como lavar y curar heridas y hacer limpieza a los enfermos o a los desamparados.
Reconocimiento de su lucha de entrega
En octubre de 1979 le fue otorgado el premio Nobel de la Paz a la Madre Teresa de Calcuta, desatando sus esfuerzos por combatir el hambre y la pobreza en el mundo, en búsqueda de una comunidad mundial con valores dignos y con respeto hacia el ser humano. A solicitud de ella, el valor monetario de dicho Premio fue destinado para cubrir necesidades de los desposeídos. A partir de este reconocimiento la Misionera se hizo más conocida a nivel internacional y su labor obtuvo mayor reconocimiento.
A la Misionera le fueron diagnosticadas afecciones cardíacas desde 1974, pero ella mantuvo en el mayor secreto tal condición, porque su deseo es que nada entorpeciera su trabajo por el bien de los demás, manteniendo sus actividades hasta el final de su existencia, habiendo regresado a Calcuta poco antes, falleció el 5 de septiembre de 1997 y fue beatificada el Día Mundial de las Misiones, el 19 de octubre de 2003.
Oraciones a la Madre Teresa de Calcuta
Se han escrito cantidad de Oraciones, bien solicitando su intercesión o bien dándole gracias por un favor concedido. Alguna son las siguientes:
Oración a Santa Teresa de Calcuta
Santa Teresa de Calcuta,
Tú permitiste al sediento amor de Jesús en la Cruz
convertirse en una llama viva dentro de ti.
Llegaste a ser luz de su amor para todos.
Obtenme del corazón de Jesús… (Hacer la petición)
Enséñame a dejar que Jesús entre y posea todo mi ser,
tan completamente, que mi vida
también pueda irradiar su luz y amor hacia los demás.
Amén.
Oración a la Beata Madre Teresa de Calcuta
Beata Teresa de Calcuta, deseando ardientemente amar a Jesús como nunca antes había sido amado, te entregaste completamente a Él, sin negarle nada. En unión con el Corazón Inmaculado de María, aceptaste la llamada de Jesús para saciar su infinita sed de amor y de almas y así ser portadora de su amor por los más pobres entre los pobres.
Con confianza llena de amor y abandono total cumpliste su voluntad, testimoniando la alegría de pertenecerle a Él totalmente. Te uniste tan íntimamente a Jesús, tu Esposo crucificado, que Él, suspendido en la Cruz, se dignó compartir contigo la agonía de su Corazón.
Beata Teresa, tu que prometiste traer continuamente la luz del amor a aquellos que viven en la tierra, intercede para que también nosotros deseemos saciar la ardiente sed de Jesús amándole apasionadamente, compartiendo sus sufrimientos con alegría y sirviéndole de todo corazón en nuestros hermanos y hermanas, especialmente en aquellos que, más de todos, son “no amados” y “no deseados.” Amén.
Oración a la Madre Teresa de Calcuta
Beata Teresa de Calcuta, tú permitiste que el amor sediento de Jesús en la Cruz llegara a ser una llama viva dentro de ti, y así, convertirte en la luz de Su amor para todos. Consígueme del Corazón de Jesús lo que con gran deseo te pido a continuación…
(Hacer la petición)
Enséñame a permitir que Jesús penetre y posea todo mi ser tan completamente que mi vida también pueda irradiar su luz y su amor a los demás. Amén