Santa Bibiana fue una mártir romana, de quien se tiene poca información histórica y abundante testimonios anecdóticos. Se dice que su fecha de nacimiento fue en el año 347, en el seno de una familia cristiana practicante. Su madre de nombre Dafrosa pertenecía a la nobleza romana y su padre Faviano desempeñaba el cargo de Prefecto de Roma.
En el año 361 asumió el poder como emperador Juliano II, personaje este que públicamente se manifestó pagano repudiando abiertamente de la fe católica, reanudándose la persecución de todos quienes profesaban el cristianismo. Para ese entones Bibiana contaba 14 años.
El padre de Bibiana fue destituido de su cargo y al verse libre de sus ocupaciones se dedicó a ayudar y dar auxilio a los perseguidos y a personas necesitadas; cuando el nuevo prefecto se enteró de las actividades de Faviano, lo persiguió hasta asesinarlo a él y a su esposa. No contento con estas muertes, el funcionario trató por todos los medios que las dos hijas del matrimonio renunciaran a su fe cristiana, hasta llegar a dejarlas sin alimentos por tiempo prolongado. Demetria, la hermana de Bibiana falleció pero esta resistió y logró sobrevivir.
A partir de allí empezó su lucha y desafíos con el funcionario, quien para doblegarla la confió a una celestina quien le presentaba toda clase de oportunidades para que cayera en el pecado, pero Bibiana se conservó apegada a su fe y se defendió ante todas las provocaciones. Ante la firmeza de la joven, procedieron a atarla a una columna donde fue golpeada y flagelada hasta que murió, siendo su cuerpo lanzado a los perros que inexplicablemente no se acercaron al mismo dejándolo intacto, siendo posteriormente enterrado donde estaban sus padres y su hermana.
Representación iconográfica
La imagen de Santa Bibiana está asociada a su condición de mártir y a la forma como fue asesinada. Se le representa junto a una columna donde fue flagelada y azotada, llevando una corona símbolo de martirio y mostrando un rostro sonriente quizás por su certeza que su destino era estar disfrutando de Dios.
Devoción a Santa Bibiana
El fervor que se le tiene a esta Santa en cierta forma radica en aspectos legendarios más que en hechos reales comprobables, estos últimos tienen su basamento en las narraciones realizadas por el Papa Simplicio quien es uno de los pocos que se dedicaron a recoger y trasmitir pasajes dela vida de esta Santa. Sus relatos han permitido que sea venerada por la Iglesia católica desde ese entonces.
Se le considera patrona de los enfermos mentales y de los epilépticos; así como también para pedir la recuperación de bebedores. El día de Santa Bibiana se festeja el 2 de diciembre.
Reconocimiento a Santa Bibiana
En proximidad al distribuidor de trenes en Roma puede distinguirse la iglesia de Santa Bibiana, erigida no solo a esta mártir y santa sino también en recuerdo a sus padres y a su hermana Demetria, ya que los cuatro en conjunto sufrieron la injusta persecución por el hecho de ser creyentes.
A pesar que desde el año 313 el emperador Constantino había decretado la libertad que tenían los ciudadanos para practicar cualquier culto religioso, para la época de Bibiana estaba de emperador Juliano quien era de creencias no cristianas y promulgaba el restablecimiento del paganismo al imperio, procediendo a la persecución de las familias creyentes. Así la situación, encargó al gobernador de Roma, de nombre Aproniano para que, por ser creyentes, sometiera y castigara a la familia de Faviano quien había ejercido previamente la gobernación de Roma y era de noble origen.
Al negarse la familia a abandonar sus convicciones religiosas, los padres de Bibiana fueron asesinados; mientras que ella y su hermana fueron confinadas a reclusión sin derecho a alimentarse para que desfallecieran de hambre, objetivo que lograron en el caso de su hermana, mientras que Bibiana milagrosamente resistió. Ante esta demostrada resistencia fue sujetada a una columna y golpeada con cuerdas metalizadas hasta que consiguieron asesinarla. Sus restos, recogidos por un creyente, fueron depositados sobre los de sus padres y hermana, en un sitio donde reposaban los de otros miles de mártires.
Se comenta que en el siglo IV, en el lugar donde estaban enterrados, una mujer vecina al lugar, levantó un primer altar en honor a la familia de Bibiana. Otros afirman que tiempo después, en el siglo V, al ser encontrados los restos de Bibiana sobre las tumbas de sus tres familiares, el Papa Simplicio en homenaje a esta mártir y santa, dispuso la edificación de una capilla, que luego fue trasformada en basílica.
La iglesia de Santa Bibiana
A partir de 1224 la iglesia ha sido reconstruida y restaurada en algunas oportunidades. Le ha sido modificada la fachada y en su interior ha sido incorporada una estatua de la mártir, construida en mármol. También se observa allí la propia columna donde la Santa sufrió los azotes de la flagelación.
Creencias populares
Se desconoce el por qué se le tiene como intercesora para la recuperación de los bebedores o alcohólicos; pero se dice que parte de la reclusión a que fue sometida, la cumplió en una casa dedicada a la reclusión de enfermos mentales y por eso se le tiene como protectora de los enfermos mentales.
Otro hecho curioso es que la columna donde fue atada para flagelarla y que está en la iglesia construida en honor a Bibiana, hubo de ser resguardada por un enrejado metálico, debido a que el público se llevaba trozos de la misma para mezclarlas con agua y plantas presentes en el lugar donde fue sacrificada y con ello obtener un brebaje al que le daban una connotación milagrosa.
Oración para pedir fortalez
Santa Bibiana,
te pedimos con la mayor confianza
que nos concedas fuerzas físicas
y fortaleza espiritual
para enfrentarnos a las dificultades
que esta vida terrenal nos presenta.
Al igual que tú pudiste soportar
tanto martirio
sin llegar a flaquear en ningún momento,
concédenos la firmeza necesaria
para vencer nuestras debilidades
y siempre mantener nuestra fe
en Dios nuestro Señor. Amén.